Para un persona que está enferma, ver a sus seres queridos y poder abrazarlos les ayuda para sentir alguna mejoría en sus ánimos. Cuando la abuela de Shelby Hennick fue internada en el hospital por una mala reacción a los medicamentos que tomaba, a ella se le ocurrió la brillante idea de llevar a escondidas a su perrita Patsy.
Shelby sabía que los animales no son admitidos en los hospitales, fue así como lo camufló con una gran manta y lo hizo pasar como si fuera un bebé en brazos. Su abuela vive con Patsy desde hace 13 años y ella sabía que ver a su adorada mascota iba a alegrarle el día.
Patsy y la abuelita de Shelby se alegraron mucho de verse, y la pequeña mascota se mantuvo en silencio mientras estuvo de visita. Según la joven, las enfermeras parecían sospechar de lo que estaba pasando, pero decidieron no hacer nada al respecto. Ella publicó su anécdota en su cuenta de Twitter y ha tenido muchas respuestas positivas sobre su adorable atrevimiento.
