El actor Ashton Kutcher desató lágrimas y aplausos en la premiación Pillar of Character Robert D. Ray. El evento anual recauda fondos para el Centro Robert D. y Billie Ray en la Universidad Drake, que provee programas educativos para niños y comunidades. El premio fue otorgado a Kutcher por sus esfuerzos humanitarios y educativos. En su discurso tocó temas como la familia, el amor, carácter y cuánto aprendió sobre su gemelo, Michael Kutcher, quien nació con parálisis cerebral
“Yo no vine a recibir este premio para mí mismo. Vine para recibirlo por todos ustedes. Yo soy el afortunado”, dijo. “Mi hermano nació con parálisis cerebral y me enseñó que amar a la gente no es una elección. Y que la gente no es creada de la misma manera”.
“Nosotros somos creados de manera increíblemente única, y con capacidades para actuar, pensar y ver el mundo. Pero todos tenemos la misma capacidad de amarnos unos a otros. Y esa fue la mayor lección que mi hermano me enseñó. Cuanto más pasaba el tiempo, me sentía peor por la situación de mi hermano. Pero él me enseñó que tenía dones que yo no tenía, dones extraordinarios que yo no tenía. Y cada vez que sentía pena por él, o lo menospreciaba, él simplemente me demostraba lo increíble que es”.
Asimismo, se centró en el tema de carácter (referido al premio que se le otorgó). “El carácter se esconde y aparece cuando nos enfrentamos a un enorme desafío. Aparece cuando estás acompañando a tu hermano a la escuela y algún niño mayor lo golpea en la nuca porque quiere pelear con él, y tú le dices ‘no’. Es entonces cuando el carácter aparece”.
Además, el actor habló sobre su esposa Mila Kunis y sus dos hijos Wyatt y Dimitri. “Cuando mi esposa y yo nos convertimos en padres, compartimos ese honor increíble. Y lo primero que pasó por mi cabeza fue llamar a mis padres y decirles: ‘lo siento, porque nunca supe cuánto me amaban», dijo.
Finalmente, cerró su discurso dedicando el premio al público y a su familia: «Este premio es para ustedes. Es para mi familia, para mis cuatro padres. Es para mi esposa, que me da una patada sobre carácter todos los días».
