Esta historia parece haber sido escrita por un guionista de películas románticas. Isaac y Teresa siempre se amaron, y tanto fue su amor, que no podían vivir el uno sin el otro.
Isaac cuidó mucho de su esposa, al punto de que murió junto a ella. Teresa falleció 40 minutos antes que él y apenas pudieron soltar sus manos en el cuarto de hospital Highland Park de Chicago.
Esta pareja había firmado un documento donde pedían no ser reanimados. Según Clara Varkin Gesklin, la hija de esta pareja, señala que «decidieron sacarle la máscara de oxígeno por recomendación de los doctores y porque los dos habían firmado un documento en el que pedían que no los reanimaran.»
Además, le dijeron que «su papá no iba a durar mucho tiempo, por la condición en que ya encontraba su piel y uñas; en cambio, su mamá iba a vivir más». También, detalló que sus padres ingresaron al hospital con un día y medio de diferencia.
Teresa e Isaac estaban en el mismo piso del hospital, sólo habían 10 habitaciones que los separaban. Por ello, los médicos permitieron que la familia pudiera unir las camas en la misma habitación.
Isaac cuidó mucho de su esposa Teresa, quien padecía de Alzheimer. Él amaba a su esposa pese la enfermedad que ella tenía. Cuando sus hijos le propusieron contratar una enfermera, él se negó y fue él quien se encargó de su compañera
Isaac y Teresa se conocieron hace 70 años en una fiesta familiar en Argentina. Siempre estuvieron juntos cuando tomaron la difícil decisión de ir a Estados Unidos en busca de un mejor futuro para su familia
Al funeral de esta pareja, asistieron más de 100 personas, porque eran muy queridos. Su hija señala que despidieron a su madre con rosas y a su papá con flores azules. Resalta que fue una hermosa despedida.