Diciembre del 2016 nos sorprendió con la inesperada noticia de la muerte de Carrie Fisher. Para muchos fanáticos de Star Wars, enterarse de este suceso fue muy duro, pues ella es quien dio vida a la mítica princesa Leia, personaje querido por muchos por su gran valentía y actitud guerrera.
El deceso de la actriz fue repentino y los forenses no sabían qué fue lo que ocasionó su muerte. Sin embargo, luego de 6 meses de lo ocurrido, ya hay una respuesta de la causa: apnea del sueño, el cual es un síndrome que causa interrupción de la respiración, mientras la persona está durmiendo. Estas pausas pueden ser leves, moderados y severos. Si es leve, se dan, aproximadamente 10 pausas por ahora; pero, si es grave, las pausas suben a 30 veces por ahora.
Algunos funcionarios de la oficina del médico legista, indicaron que la actriz también tenía acumulación de grasa en las paredes arteriales y que ella había ingerido varios fármacos antes de su muerte, sin embargo, no se ha establecido si también esto ha influido para su inesperado fallecimiento.
Tras el comunicado forense que indicaba la causa de la muerte de Carrie, su hija declaró que también habían encontrado en su cuerpo restos de cocaína, morfina, codeína, oxicodona, heroína y éxtasis. Ella contó a la prensa de que su madre había vivido durante muchos años luchando contra su adicción a las drogas y la bipolaridad que sufría. No se sabe cuánto tiempo antes de su fallecimiento, Carrie consumió estas drogas, es por eso que no se ha establecido como causantes principales.
