Si bien es cierto que existen muchas razones que a uno le quitan la sonrisa por lo que sucede en el mundo, es cierto también que existen momentos que valen la pena inmortalizar y que, por más pequeños que se puedan ver, son la esencia de nuestra vida.
Esto mismo es lo que nos muestra la ilustradora turca Eda Kaban, quien ha retratado con bellos toques aquellos detalles que hacen que la vida sea la más hermosa experiencia, sobre todo cuando tenemos a nuestro lado personas con quien gozarlas.
Despertar y que te reciba un buen amigo

Tener a esa compañía que alegra cualquier mañana

Saber que tus hijos serán a quienes primero verás

Descubrir su mundo de imaginación y juegos

Descubrir sus ocurrencias en cada travesura

Saber que se van contentos a llenar sus cabezas de conocimientos

Cultivar el cuerpo con ejercicios

Pasar un agradable almuerzo con amigas

Cumplir todas tus metas y tareas del día

Viajar y conocer nuevos sitios

Pasear por nuevas calles

Encontrarte con aquella persona de manera sorpresiva

Aquellas muestras de afecta en donde lo demás no existe

Tener la buena compañía de un amigo que comparta tus gustos…

Y la compañía de muchos más cuando lo necesites

Llegar a casa y toparte con las ocurrencias de tu hija

Ver a un padre que todas las noches les lee a sus hijos

Poder atender aquellas dudas y curiosidades que se dan

Cerrar el día felices y saber que lo están haciendo muy bien

La propuesta de esta artista nos hace recordar aquellos momentos que nos gustaría volver a vivir eternamente y que, lejos de la rutina y del trajín del día a día, nos remiten a nuestra propia humanidad y a aquellas experiencias que nos recuerdan que todos somos seres humanos con sentimientos, sueños y anhelos, y que las mejores cosas están, sin duda alguna, en aquellos pequeños detalles.
Imágenes: Eda Kaban

