¿Te imaginas comprar un anillo por 15 dólares, usarlo a diario y después enterarte que vale casi medio millón de dólares? Esto fue lo que le pasó a una mujer cuya suerte –hay que admitirlo– despierta la envidia de cualquiera. Su joya resultó ser un diamante costoso.
Hace más de treinta años, esta mujer, compró una piedra “excepcionalmente grande” de un mercado de pulgas en Londres. Ella llevó el anillo por años, incluso mientras hacía compras o quehaceres. Todo esto, obviamente, ignorando su verdadero valor.
Finalmente, se animó a llevar el anillo a la casa de subastas Sotheby’s después de que un joyero le dijera que el objeto podía ser valioso. Y, efectivamente, el valor de la joya era nada más y nada menos que $450,000. Esta será subastada el próximo 7 de junio.
Entonces, ¿cómo es posible no reconocer el valor de la joya a primera vista? Jessica Wyndham, jefa del departamento de subastas de Sotheby’s dice que “con un viejo estilo de corte, la luz no refleja tanto como lo haría con un moderno corte de piedra. Antes se trabajaba con la forma natural del cristal, para conservar tanto peso como fuera posible en lugar de hacerlo más brillante”.
Se trata de una joya de 26.27 quilates. El diamante fue cortado en el siglo XIX en forma de cojín. Según explica Wyndham, el anillo fue comprado en 1980 como bisutería. La dueña lo usó de diario por más de treinta años sin siquiera sospechar su valor.
Sotheby’s envió el diamante a ser examinado en el Instituto Gemológico de América. Ahí determinaron que el corte dataría del siglo XIX. Esto hace que la duda sobre cómo pudo haber terminado en un mercado de pulgas sea aún mayor. No obstante, lo que no supone duda alguna es la alegría que el hecho produjo a la dueña. Y es que el valor de la joya –casi medio millón de dólares– produciría emoción a cualquiera, especialmente, cuando se trata de un objeto que compraste con solo $15.
Fuente de imágenes: Sotheby’s