Según muchos médicos, el skate es uno de los deportes más riesgosos debido a la cantidad de accidentados que han terminado en la sala de emergencia. Y si bien es un deporte sano, es cierto que requiere de mucho cuidado y que no todos pueden hacerlo. Pero ese no es el caso de Dan Mancina, quien además es casi ciego.
Desde muy pequeño Dan quiso subirse a una patineta y desde que lo hizo no se detuvo. Pero cuando cumplió 13 años, comenzó a sufrir de renitis pigmentaria en su ojo derecho, la cual hace que su retina sea incapaz de responder a la luz. Esto es un proceso que se va dando de a pocos y que primero hace que uno pierde la vista nocturna y luego la periférica.
Pero esto no ha sido motivo para que este muchacho deje de hacer lo que lo apasiona. Si bien todavía puede distinguir cosas a través de su ojo izquierdo, con la ayuda de un bastón y de un indicador sonoro hace piruetas mejor que mucho de nosotros. Y cuando se cae haciéndolas, se vuelve a levantar para seguir intentándolo las veces que sea necesario.
A través del enlace a continuación conozcan una historia inspirada en Akira Kurosawa que cuenta la historia de un jedi ciego bajo la temática samurái.
Imágenes: Jenkemmag